Como te contamos la semana pasada, cuando te extraen una muela, se coloca una gasa en el agujero donde previamente había una muela. El motivo principal es que eso facilita la finalización del sangrado y, además, ayuda a que se forme una especie de coágulo que «tapone» el agujero. ¿Pero cómo sé cuándo debo quitarme la gasa? ¿Debo esperar un tiempo determinado o mirar cuando deje de sangrar?

¡Te lo contamos!

En principio, suele bastar con utilizar la primera gasa durante unos 45 minutos. Después, deberás quitarla sin más. No obstante, en algunos casos, suele ser necesario colocar dos gasas. Así, quitas la primera en 45 minutos y tú mismo te pones la segunda. Otros 45 minutos y listo. En concreto, debes tener la gasa hasta que la hemorragia finalice, aunque hacerlo por tiempo es mucho más sencillo.

Déjanos un comentario