Sólo es necesario darse un paseo por las redes sociales para ver decenas de jóvenes influencers promocionando productos y maneras de blanquearse los dientes en casa. Esperamos que no hayas caído en la trampa porque los blanqueamientos caseros tienen muchos más contras que pros. ¡Te damos más detalles!
- Desgaste del esmalte. Es importante que un profesional sea quien valore qué tipo de esmalte tienen tus dientes y si tienes algún problema relacionado, ya que el esmalte no se recupera.
- Sensibilidad extrema. Como consecuencia del primer inconveniente de los blanqueamientos caseros, se puede producir una sensibilidad extrema al beber o comer alimentos fríos o calientes.
- Dolores por mal uso. Si el aparato o producto blanqueador se coloca sobre una caries, puede provocar grandes dolores. Asimismo, si el paciente tiene problemas en las encías se pueden agravar enormemente.
Si realmente quieres someterte a un blanqueamiento dental, solo debes hacer una cosa: acudir a tu dentista de confianza. Solo él será capaz de hacerte una valoración completa y comentarte qué tipo de blanqueamiento es mejor para ti. Además, puedes evitar fumar y alimentos que manchan los dientes como el café, el té negro o los colorantes.