Acudir a la clínica dental cuando tenemos algún dolor o molestia es más que habitual. Seguir las pautas de asistir dos veces al año al dentista aunque no tengamos ningún problema, ya es algo menos común. Pero cuidar la salud bucodental de nuestros hijos desde el primer momento en el que les nace un diente, lo es todavía menos.

Por desgracia, es bastante frecuente encontrar a personas que creen que no es necesario cepillar los dientes de su bebé. Por supuesto, no están en lo cierto. De hecho, es esencial cepillar los dientes en el momento en el que sale su primer diente. Esta es la única manera de prevenir futuras caries y, por tanto, posibles problemas futuros.

Para que el cepillado de los dientes de tu bebé sea correcto te aconsejamos dos aspectos. El primero es que el cepillo sea adecuado para él, obviamente más pequeño y suave que el de un adulto. El segundo es que lo hagas dos veces al día y con una pasta baja en flúor.